martes, 8 de noviembre de 2011

PENSABA EN TI

                    Tropical Ocean Plumeria Enjoying a vacation filled with ...
Ayer sentado en mi sillón pensaba en ti: 
               
En ti, MENDIGO, que decidiste dejarlo todo por nada y que ahora pides clemencia de cinco euros.

En ti, ALBAÑIL, constructor de sueños, que ladrillo a ladrillo dejas pétreo y sin vida aquello que te mandan los sabios de lo material.
                   
En ti, PASTOR, que cuida de las ovejas de otro, que trashuma ganado a mejores climas y que eres padre adoptivo de hijas ajenas, que andas sin descanso dialogando sólo  pero rodeado de comprensión aunque sea animal.
                   
En ti, ENAMORADA, que suspiras por aquel descarrilamiento no pensado, que te dejó una herida de la que precisas UVI por mucho tiempo.
                   
En ti, CANTANTE sin escenario, que tarareas con gozo al son de trompetas celestiales, que cuidas la voz para no desentonar antes de recibir silbidos, que pensabas hacer carrera de fondo y te has quedado en segundo de coro eclesial.
                   
En ti, TORERA, valiente, más pequeña de estatura que tu rival, que naciste de banderillero, vivirás de novillera y morirás sin previo aviso.
                  
En ti, MORIBUNDO, que clamas justicia, que luchas y te agarras a este mundo como una lapa, que cambiarías tu fortuna por mejor salud, que dejas testamento a aquéllos que nunca te quisieron.
                   
En ti, PRESTIDIGITADOR, que rezas mientras prestidigitas, que todo te sale y no sabes muy bien por qué, que eras científico hasta que te convertiste en divulgador de destrezas coloridas.
                     
En ti, BANDIDO, perseguido, que cambias de cara y de caballo, que no sólo robas corazones sino también ilusiones, que te cambiarías a policía si no fuera porque ya lo eres.

En ti, MADRE, plasmada en poemas de Dámaso Alonso, que ya no puedes con tus pobres remos hinchados deformados por el veneno del reuma, que siempre cargas con la culpa de tus hijos, que pariste con dolor, que se  irán dejándote compuesta y con marido -sino se te fue antes-.  
   
En ti, GUERRERO en paro, o MUJER que esperas, u HOMBRE desalmado… Y a ti, precisamente a ti, te escribo estas líneas sin saber muy bien porqué. Sólo me guía la necesidad de plasmar en esta hoja inmaculada aquello que surja del trazo de mi  mano. Y mira por dónde, apareces tú, tan natural y feliz.
                   
Impulsado por mi sistema nervioso y guiado por las órdenes del cerebro, me recuerdas a alguien. Tú, mendigo, albañil, pastor, enamorada, cantante, torera, madre, moribundo, prestidigitador, bandido, guerrero, mujer u hombre.
                   
Porque como alguien dijo en cierta ocasión:
                   
          “HAY HOMBRES QUE LUCHÁIS UN DÍA Y SOIS BUENOS,
          OTROS QUE LUCHÁIS MUCHOS DÍAS Y SOIS MUY BUENOS
          Y LOS QUE LUCHÁIS TODA LA VIDA...
          VOSOTROS SOIS IMPRESCINDIBLES.
                   
Aunque, al final terminamos siendo, en gran medida, los papeles que socialmente representamos y por simpleza e indignación la naturaleza no quiere la felicidad.
Personas Grupo Multitud - Gráficos vectoriales gratis en Pixabay

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja aquí tu opinión